martes, 29 de diciembre de 2009

CON ORGULLO


Cuando volvíamos de Madrid el pasado día 12, hubo unos momentos en el viaje, en los que casi todo era silencio. Esos momentos que aún sin querer, te hacen reflexionar. Y tengo que reconocer que fue agradable. Es más, fue algo así como reafirmación en que no está todo perdido. En que a la inmensa mayoria de las personas que estábamos haciendo ese viaje, no nos movía otra cosa que esa conciencia de clase que en tantas ocasiones damos por muerta, no sin razón.

Y esa misma sensación he tenido hoy, repasando entradas antiguas en nuestra Xarxa Sindical.

Es un privilegio el constatar como hay Secciones Sindicales y compañeros individuales que continuan en la brecha reivindicativa en posicionamientos firmes de rumbo claro. Compañeros y compañeras que merecen toda mi admiración por su constancia, que sin lugar a dudas se fundamenta en su conciencia sindical y social. Y que huyen de climas narcisistas y florecitas en el blog.

Me tranquiliza que estén ahí. Me reafirman cada vez que leo sus artículos, en que el sindicalismo socialista está vivo y ellos lo representan de forma clara.

Comparto con ellos sus posiciones críticas, por la legitimidad que les concede su actuación.

El camino que nos queda es largo y lleno de trampas. El lado oscuro de la fuerza ya se ha llevado a unos cuantos, aunque su apariencia sea normal. Pero en ese camino nos encontraremos. Luchando por lo que creemos y por lo que somos. La dignidad de la clase obrera.
Porque nunca suene a vacía la palabra compañero/a.


Paco Fernández, diciembre 2009